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Este será un año importante para Albert Torres. Además de debutar en el WorldTour con 29 años en el Team Movistar, el ciclista menorquín está concentrado en los Juegos Olímpicos y espera conseguir la victoria en el Madison olímpico junto a su compañero de equipo Sebastián Mora Vedri.

“Todo lo que hago este año lo hago con Tokio en la mente: todos los entrenamientos, las horas protegiendo a mis compañeros del Movistar durante la carrera, cada vuelta en la pista. Todo por una medalla olímpica”.

Torres es muy conocido en la pista. En Madison, una competición por parejas en la que se deben completar 50 km, con esprines intermedios donde se logran puntos y donde se intenta conseguir una vuelta de ventaja, es el actual campeón del mundo y dos veces campeón de Europa. Además, tiene dos títulos de ómnium, su otra prueba olímpica en Tokio.

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“Comencé en el ciclismo con 9 años, porque un tío mío estaba metido en este deporte. Aunque nací en Menorca me trasladé a Mallorca durante la adolescencia para tener mejores posibilidades de entrenamiento. Más montañas, mejores carreteras. Además, en Palma tenemos un velódromo fantástico, pero Menorca es mi casa, es donde está mi familia, y donde encuentro paz y tranquilidad.”

A sus 29 años debuta en el WolrdTour, la división máxima del ciclismo. El capitán del Team Movistar, Alejandro Valverde, dijo de él que era una de las incorporaciones más potentes al equipo. Los ojos de Torres brillan cuando oye los elogios del campeón español. 

“Es fantástico cuando escuchas esas palabras de un gran campeón. Es nuestro ejemplo. Mi rol en el equipo es proteger a líderes como él.”

“Mi punto fuerte como ciclista de pista es que me abro camino fácilmente dentro del pelotón. Esa versatilidad es muy útil cuando el líder del equipo necesita llegar a la parte delantera”.

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“Además, es algo que también puedo enseñar a mis compañeros de equipo. He esperado mucho tiempo una oportunidad como esta. El equipo apoya al 100% mi ambición en la pista y me ofrece el mejor calendario y material, con SRAM eTap AXS y ruedas ZIPP. Es un sueño hecho realidad.”

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Torres no es nuevo en la carretera. Fue campeón de España sub-23 en 2011 y también ha subido al podio en contrarreloj, pero prefirió centrarse en la pista: “En la pista, puedo ganar las mejores competiciones, campeonatos europeos y del mundo. En la carretera, solo podría hacerlo en categorías menores”.

Los de Tokio serán los segundos Juegos Olímpicos de Torres. “En Londres competimos en la persecución por equipos sabiendo que jamás podríamos entrar en la lucha por una medalla. Pero en Tokio, Sebastián y yo somos candidatos a las medallas en Madison. Para mi, el ómnium también es una gran oportunidad, por eso estos Juegos son tan importantes.”

Firmar un el primer contrato como profesional con uno de los grandes equipos del mundo, a los 29 años, no es algo que pase cada día. Torres no tiene más que elogios para su equipo: “Lo mejor de estar en el Movistar Team es que tienen un calendario muy largo con carreras de mucha calidad, y cuentan con los mejores profesionales y materiales. Entre el Campeonato del Mundo de Berlín de finales de febrero y los Juegos Olímpicos hay seis meses, y para mí es importante competir con el equipo y entrenar la resistencia para la pista, porque las dos disciplinas son una gran combinación. Estoy deseando trabajar junto a los líderes del equipo y aprender en la carretera. Competiré en pruebas que he visto por la tele durante años”.

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Torres, left with teammate Mora, right

Su compañero en el Madison, Sebastián Mora, está en el mismo equipo: “Competiremos juntos en las mismas pruebas, y el resto no. Para nosotros es muy importante estar en un equipo como el Movistar, para conseguir una base sólida de cara a las pruebas de velódromo. Las tres semanas previas a los Juegos cambiaremos a un entrenamiento más específico de pista, pero antes de eso, competiremos con el Team Movistar.”

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Cuando se le pregunta qué medalla de Tokio tendría más significado para él, si la individual del ómnium, una prueba en la que ya ha conseguido dos títulos europeos y algunas copas del mundo, o la del Madison, en la que se compite en equipo. No duda: 

“Me encanta el ómnium, pero ganar un oro junto a un amigo como Sebastián, al que hace mucho que conozco, desde las competiciones en categorías inferiores en España, sería alucinante.”

Este año todo gira en torno a Tokio, pero el tranquilo, y en cierto modo tímido, Torres, tiene puesta la mirada más allá: “me pasaré a la carretera después de la temporada 2020. Mi sueño es correr el Tour de Francia. Lo he visto en la tele desde que era un niño y competir en ese tipo de pruebas será fantástico.”

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